Algunas personas dicen que «los humanos deben ser respetados porque son humanos», lo cual es hacer uso de la falacia de petición de principio que caracteriza al antropocentrismo.[1] Al usar dicha falacia no se da un razón para respetar a los humanos, pues ya sabemos que «los humanos son humanos», que «los blancos son blancos» y que «los hombres son hombres». La razón por la que los humanos deben ser respetados es porque cada uno de ellos tiene una conciencia[2] en la cual siente y tiene INTERESES. A partir de dichos intereses se origina el deber ético de respetarles.[3] Quienes no son humanos deben ser respetados exactamente por esta misma razón. Discriminar a alguien porque pertenece una determinada especie es especismo.[4] El especismo es una discriminación arbitraria que sigue el mismo patrón que siguen todas las discriminaciones arbitrarias (sexismo, racismo, etc.): no se centran en si un ser es alguien, sino en las características de ese alguien para discriminarle y usar la violencia contra él por ser diferente.
Introducción a la industria de la venta de «mascotas»
En las tiendas de animales o tiendas de «mascotas» se venden animales no humanos de muy diferentes especies. Voy a centrarme en los perros, pues es lo que más se conoce, pero los animales de otras especies también padecen maltratos similares.
1. El infierno de los criaderos
Los propietarios de las tiendas de animales compran los animales a los criaderos. En los criaderos ocurre todo esto:
- Los criadores explotan a las hembras como máquinas reproductoras: las encierran en jaulas, las violan y las asesinan cuando dejan de serles productivas.
- Los criadores matan a los cachorros con defectos físicos que creen que no podrán vender.
- Los criadores separan a las madres de sus hijos.
- Los criadores son causantes de la sobrepoblación de animales y por lo tanto de sus nefastas consecuencias.
En los criaderos, los cachorros son destetados demasiado pronto para ampliar el margen de venta, perdiendo estos la inmunidad maternal y quedando expuestos a contagiarse de cualquier enfermedad, la más frecuente y peligrosa es la parvovirosis canina.
Así funcionan los criaderos de perros de Europa del Este (Link)
En febrero de 2018, la organización PETA Asia hizo pública una investigación sobre los perros confinados en las fábricas de cachorros en China.
En 2014, el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente de España publicó un estudio en el que reveló que aproximadamente el 85% de los animales que se venden por Internet provienen de criadores particulares, que por lo general no suelen incluir la cartilla sanitaria, el chip, las garantías genéticas y víricas, o el contrato de venta por escrito. Estos animales también provienen de madres usadas como máquinas de cachorros, se separa a madre e hijos y se genera sobrepoblación. En España, la Real Sociedad Canina inscribió en 2016 a 61.524 nuevos perros. Ese mismo año fueron abandonados 104.447 perros en España, según datos de la Fundación Affinity.
2. El viaje desde los criaderos a las tiendas de animales
Muchos cachorros y otros animales son transportados desde criaderos de los países de Europa del Este (Hungría, Eslovaquia y Eslovenia) a tiendas de mascotas en España y en otros países. Son perros «de raza». Las razas más demandadas en España son los westies, yorkshires, carlinos, bulldogs franceses, bichones malteses, labradores, spitzs alemanes, pinschers y chihuahuas.
El viaje desde el criadero a la tienda dura hasta tres días por carretera con los perros sin vacunar y metidos en pequeñas jaulas en las que se transmiten entre ellos diversas enfermedades. Muchos mueren enfermos antes de llegar a la tienda, o debido al calor y al estrés. Los que llegan vivos están enfermos y es frecuente que mueran a los pocos días.
En 2012, las protectoras estimaban que unos 8.000 perros llegaban «ilegalmente» a España cada mes para ser vendidos en tiendas de mascotas.
3. Las jaulas de cristal de las tiendas de animales
Las tiendas de animales compran los animales a los criaderos. Por lo tanto cuando alguien compra animales en estas tiendas está promoviendo los criaderos de animales. Si queremos un animal no humano debemos ayudar a uno adoptándolo en una protectora de animales.
Los animales viven encerrados en pequeñas jaulas de cristal en las que reciben una mala alimentación y pésimos cuidados.
Durante el día son expuestos como cualquier otro producto a la venta, y son sometidos a un estrés permanente debido a las fuertes luces y a los ruidos. Muchos animales están solos en la jaula, por lo que ni siquiera pueden socializar. No pasean, no corren, no reciben cariño. Durante la noche se quedan solos, sin supervisión.
4. Los animales enfermos son asesinados
Cuando un animal se pone enfermo no suele recibir tratamiento veterinario, sino que le ponen en oferta o le dejan morir para ahorrar gastos veterinarios. Les sale más barato que muera y comprar otro animal al criadero.
Llegó hasta tal punto el negocio del maltrato animal que hasta se crearon falsas asociaciones protectoras (algunas incluso legales) para tramitar los sacrificios o las adopciones de estos animales procedentes de criaderos.
No compres cachorros en las tiendas de animales (Link)
¿Cómo poner fin a este maltrato?
En otro artículo explico que es mala idea intentar ayudar a estos animales comprándolos porque al hacerlo se hace más grande el problema.[5] Lo que debe hacerse es adoptar, denunciar irregularidades en las tiendas para que les multen, hacer activismo contra ellas (por ejemplo firmando esta petición) y votar a partidos políticos que en su programa político lleven la ilegalización de la compraventa de «mascotas».
El 14 de septiembre de 2017 la Asamblea de California promulgó la Ley 485 de Rescate y Adopció de Mascotas que prohíbe la venta de «mascotas» en los comercios, y que fue aprobada en el Senado Estatal de California por 38 votos a favor y 0 en contra. Dichos comercios deberán acoger a perros y gatos procedentes de las protectoras para su adopción. Éste es el camino político a seguir.